Cada 4 de marzo se celebra en todo el mundo el Día Mundial Contra la Obesidad. La obesidad y el sobrepeso suelen ser el resultado de un desequilibrio entre las calorías ingeridas y las calorías gastadas, y se caracterizan por la acumulación anormal o excesiva de grasa en el cuerpo humano.
Según la Organización Mundial de la Salud, ambas condiciones configuran una epidemia y es por esta razón que se celebra este día para prevenir y revertir estas dolencias que afectan a la mitad de la población en todo el mundo.
La obesidad afecta a la vida diaria, y en la esfera de las incapacidades, este trastorno puede provocar una pensión por incapacidad permanente si no permite al afectado desarrollar una profesión, como fue el caso que nuestro centro médico jurídico llevo adelante donde se concedió una pensión a una paciente con obesidad mórbida que trabajaba como cocinera, ya que una persona con estos problemas médicos y con un peso de 118 kilos no es posible que trabaje una jornada ordinaria estando de pie en una cocina, padeciendo además un Trastorno de Conducta Alimentaria. (ver sentencia)
La obesidad puede ser motivo de incapacidad permanente en los casos de obesidad mórbida, se entiende por mórbida la condición en la cual la persona pesa 50 kg o más por encima de su peso corporal ideal, sin embargo, la obesidad en sí es un factor agravante del cuadro clínico y padecerla puede provocar el desarrollo de otras patologías como:
- Presión arterial alta
- Enfermedad cardíaca
- Derrame cerebral
- Apnea del sueño
- Síndrome metabólico
- Enfermedades del hígado graso
- Osteoartritis
- Enfermedades de la vesícula biliar
- Enfermedad renal
- Depresión
Si bien la incapacidad permanente por obesidad no es muy común, la probabilidad de concesión aumenta de forma considerable cuando coexiste con otras enfermedades. Nuestro centro ha conseguido incapacidades permanentes donde los trabajadores padecen de obesidad lo que ha aumentado sus limitaciones y ha provocado la aparición de otras patologías.
Incapacidades Permanentes por obesidad
Nuestro director, Alejandro Rusiñol, aconseja a todos los trabajadores que padecen de obesidad y hayan agotado las posibilidades terapéuticas para tratar la patología valorar las posibilidades de solicitar una incapacidad permanente con motivo de priorizar la protección de la salud e incluso pudiendo mejorar su calidad de vida.
Si desea valorar su caso con nuestros profesionales puede realizar una valoración médica pulsando aquí.
Si desea recibir asesoramiento o tiene alguna consulta puede contactar con nuestro centro de lunes a viernes, de 9 a 14 h. a través de las líneas telefónicas 933 800 100 o 910 376 935.