Neuralgia del trigemino como motivo de incapacidad permanente.
La neuralgia del trigémino (o neuralgia de arnold) es el trastorno neuropático relacionado con el nervio trigémino (nervio craneal mixto con tres ramas: oftálmica, maxilar y mandibular, que cumple importantes funciones sensitivas y motoras).
La neuralgia del trigémino provoca dolor, similar a una descarga eléctrica, en una zona determinada del rostro provocando, en ocasiones, parálisis facial. El dolor aparece y desaparece de forma repentina, soliendo aparecer frente a estímulos inocuos como lavarse la cara, masticar o sonarse la nariz. Puede provocar sensibilidad a la luz y sonidos (fotofobia y fonofobia). La sensación dolorosa empeora al mover o rotar la cabeza.
Existen varias causas asociadas a esta afección de la salud, si no hay presencia de un evento traumático o quirúrgico, a menudo la causa suele estar relacionada firmemente con la compresión y la inflamación nerviosa por contracturas musculares o presencia de fibrosis. Esta patología está muy relacionada con pinzamiento a nivel de las cervicales, sobre todo a nivel de c2-c3, problemas cervicales provocados por situaciones de estrés muy intensas o por afecciones del propio hígado o vesícula biliar que originan espasmos o contracturas cervicales comprimiendo el trigémino.
Quienes padecen de neuralgia del trigémino también sufren otras patologías asociadas como puede ser ansiedad o depresión debido a la imposibilidad de llevar una vida corriente.
En conclusión, la neuralgia del trigémino puede ser motivo de incapacidad permanente, sin embargo para ello es necesario que la enfermedad esté debidamente diagnosticada mediante documentación médica, tenga el carácter de crónica y que ya no haya posibilidades terapéuticas o de curación.
El grado de parcial es el reconocimiento menos frecuente, ya que quienes no consiguen mejoría suelen tener afecciones tan limitantes que son merecedoras de un grado de total o absoluta. La incapacidad permanente total para la profesión habitual, por ésta patología, se concede a aquellos trabajadores en que las patologías son incompatibles con la profesión habitual pero no para la realización de todo tipo de trabajo, como sucede en lo casos de incapacidad permanente absoluta.
La determinación del grado está directamente relacionada con las limitaciones que provoca ésta patología según la frecuencia y la intensidad del dolor.
Caso real de incapacidad permanente por neuralgia del trigémino.
Los profesionales de nuestro centro han conseguido la incapacidad permanente total para un trabajador de profesión Mecánico Inspector ITV, quien padece de síndrome vertiginoso agravado por neuralgia del trigémino. Este conjunto de patologías le impiden mantenerse de pie durante toda la jornada laboral, como así también, la realización de movimientos bruscos de cuello y cabeza, movimientos repetitivos de flexión de columna cervical y la realización de trabajos de altura y en zonas próximas a desniveles.
En todos los casos de incapacidad permanente se tendrá que determinar la gravedad del diagnóstico, determinado por las crisis y la intensidad del dolor, para determinar si se solicita la incapacidad permanente total o la absoluta, debido a que todas las enfermedades no afectan a todo el mundo por igual. Por este motivo nuestros profesionales recomiendan, antes de iniciar un proceso de incapacidad permanente, conocer si las limitaciones que padece son merecedoras de un grado de incapacidad.
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